lunes, 1 de noviembre de 2010

Los amores de una vida.

Dentro de cada quien siempre ha existido amor, amor por algo que nos guste, algo que quieres tanto que no podrías vivir sin él ¿Cierto? No me lo pueden negar, hablo de a lo que muchos llamamos “los amores de mi vida”, no me refiero a mujeres ni a personas, me refiero a todo en general, los músicos son unos desquiciados por la música, los pintores se cortan orejas por su parte, los chavistas morirían por su comandante y las fanáticas de Justin Beiber se meterían un tubo de 15 metros por el culo solo para decirle hola a Justin por MSN, cada quien ama algo, así de simple.

Yo no estoy exento de este círculo de amores, es más, tengo muchos, muchos de estos amores que si no fuese por ellos no sería quien soy y mi vida sería algo horrible, bueno no tanto, hay algunos de los que podría prescindir, pero a la larga los más importantes son tres, mis tres amores, las tres cosas con las que puedo pasar el tiempo y con las que no podría estar tranquilo si no las tuviese.

La primera y la más importante, la que pasa por encima de familia, novia, amigos, Chuck Norris y todo lo referente es Shirley, mi computadora. Shirley es el esfuerzo de tres años de mi vida reuniendo para poder ser feliz, ella me lo da todo, diversión, estudio, porno, ¡Todo! Yo vivo para Shirley y ella para mí, yo la amo y ella me ama incondicionalmente y solo me deja cuando no hay electricidad, por lo demás siempre está ahí para mí, nunca se mueve al menos que yo la mueva, es amor en su más pura expresión. Soy un geek, no puedo vivir sin una computadora, la tecnología es mi vida y yo no pienso como los demás, yo pienso en binario y en sentencias lógicas y la vida sin mí fría caja de metal y circuitos no sería soportable.

A algunas personas no les gustan las computadoras o no saben nada de ellas (cosa que me parece atroz) pero dedica o enfoca su amor en algo distinto; por ejemplo, uno de mis amigos es guitarrista, bueno varios pero dos son los más asiduos y excitados con su cosa. Adoran a sus guitarras y les hablan, les cantan canciones de cuna para que duerman, las pulen y las acarician, les hacen más a sus artefactos que a sus novias, y lo peor es que es completamente entendible porque no existe mejor amigo o compañero para un hombre que su artefacto o juguete favorito, mujeres hay por todas partes pero tu primera computadora o guitarra o lo que coño de la madre sea no, no hay y no habrá una segunda primera computadora y es por eso que todo hombre ama y amará siempre a su artefacto favorito, y no habrá choto (choto = vagina) en el mundo que cambie eso.

Luego de Shirley viene una substancia, el alcohol, o mejor dicho la cerveza. La cerveza y el alcohol en general son de extrema importancia para mí ya que cumple miles de funciones, me ayuda a relajarme, me ayuda a volverme loco, me ayuda a olvidar, me ayuda a recordar, me ayuda a tener excusas, ¡Me ayuda a toda mierda! El alcohol además es considerado como pegamento social y tiene el poder de juntar a un geek con un humanista, tanto así que yo sin cerveza no sería Nano. La cerveza además es tan genial que me permite ser buena gente, cuando estoy sobrio soy un maldito, una mierda, una basura, ácido, desmoralizante, mala gente y muy descortés y coño de madre; pero cuando estoy ebrio soy un tipo bueno, chistoso, divertido, jodedor, entretenido, mas caballeroso, desinhibido y sin cohibición alguna, la cerveza puede sacar lo mejor de mí, cosa que nada ni nadie ha logrado nunca.

Cabe destacar que hoy por hoy el alcohol es más una medicina que una enfermedad, tanto para hombres como para mujeres, es la droga legal más vendida del mundo y es genial, todos le debemos algo al alcohol y seguramente los momentos más épicos de nuestras vidas han pasado o pasarán estando ebrios o parcialmente ebrios. Si lloras, el alcohol te ayuda a reír, si perdiste el alcohol te ayuda a sentirte mejor, si tu mujer te deja el alcohol te ayuda a olvidarlo, lo que sea que te pase el alcohol puede despolarizarlo y cambiarlo de negativo a positivo o viceversa (hay que saber usarlo).

Mi tercer amor es pues, mi novia. No tanto porque sea una mujer ni por ningún motivo convencional, no, muy por el contrario ella es un buen escape de mi mal humor crónico y perpetuo, además que pues, bueno, hm… yo no soy bonito, ni buena gente ni atractivo y el hecho de llevar casi cinco meses en una relación, pues para mí ya es una eternidad, siendo que me ladillo de la gente todo el tiempo y muy rápidamente. De por si yo nunca había querido a nadie y ahora puedo descargar todo eso en ella, es más fácil para mí darle todo el cariño a una persona y no darle nada a otros que no darle nada a nadie y dejarlo ahí dentro, siempre lo que se acumula se desborda y no tengo pensado ser un osito cariñosito con nadie más que ella. Que por cierto, no sé cómo demonios me quiere si no soy siquiera un poco meloso con ella, pero bueno.

A la larga tanto para un hombre como para una mujer, una pareja significa mucho, no puedo definirlo pero puedo asegurar algo, hasta yo debo admitir que nadie puede vivir solo sin volverse loco, así que no te encierres en ese emo estado de “no necesito a nadie” porque es paja, no necesitas a nadie para ser tu ni para lograr tus metas, cierto, pero si necesitas a alguien para mantenerte relativamente cuerdo. ADVERTENCIA: Tener a alguien equivocado puede hacerte más daño que no tener a nadie, los divorcios son caros, pero para el hombre.

Así que ya sabes, no tengas miedo de admitir que hay alguna vaina que te gusta o que amas a alguna de tus cosas, ser un puto fetichista es normal en todo el mundo y nadie puede dar mala voz de eso, el que diga lo contrario es un maldito anormal y mentiroso de mierda.

Atte. Nano


2 comentarios:

mejor dicho.. ¿por que carájo me quieres a mi si soy una maldita loca? Digo, tienes gustos extraños man.

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